APORTES PARA LA PLATAFORMA ELECTORAL DEL FA: LA GESTIÓN DE LOS SERVICIOS PÚBLICOS

INTRODUCCION

El Comité 26 de Julio de la Coordinadora M del Frente Amplio aprobó por unanimidad de su asamblea semanal siguiente a las elecciones internas una resolución que las analiza y sostiene la urgente necesidad de disponer de una Plataforma Electoral: “Breve y comprensible para el pueblo… que unifique el discurso de candidatos y dirigentes y oriente la campaña”.
La misma resolución indica también: “… nuestro Comité considera imprescindible aumentar su discusión política y su participación en las decisiones del FA”. Consecuentemente, nuestro comité realizará los aportes a la Plataforma Electoral que considere pertinentes.

LA PARTICULARIDAD DE LA PLATAFORMA ELECTORAL 2010/15

La Plataforma para nuestro próximo gobierno debe tener una diferencia muy marcada con la Plataforma de la campaña electoral que nos llevó al primer gobierno del FA con la presidencia del compañero Tabaré Vázquez. En efecto, la presente Plataforma en elaboración debe, indefectiblemente, tomar en cuenta que estamos finalizando la primera experiencia de gobernar al país. El resultado de la anterior elección nacional nos dejó al frente del Poder Ejecutivo y quedó en nuestras manos la conducción de una masa ingente de medios de producción y de trabajadores: las empresas del estado y el conjunto de condiciones de trabajo de los funcionarios públicos. Pasamos así a ser responsables de la gestión de la actividad de trabajo de cientos de miles de empleados públicos, responsables de concretar un gran abanico de servicios a la comunidad. Y por supuesto, responsables por el accionar de los Entes del Estado, productores de una amplia gama de bienes y servicios.
Es de gran importancia la correcta gestión de los servicios públicos considerando: a) la vastedad que tienen, b) consumen casi todo el presupuesto nacional y c) afectan a la vida de los compatriotas y la competitividad de la producción del país. Su buen funcionamiento es una clave para construir el Uruguay Productivo que pretendemos.
Durante el periodo de gobierno que está finalizando contamos con la mayoría absoluta del Parlamento Nacional, es decir, con las mejores condiciones para aprobar leyes y reglamentos para la mejor gestión de la administración pública. En contrapartida, la tarea debió ser encarada por nuestro primer gobierno sin conocimientos previos ya que había sido monopolizada por los partidos tradicionales durante décadas (la excepción fue la coparticipación en los Entes a la salida de la dictadura). Tampoco tuvimos compañeros que dominaran las diversas temáticas y menos aún dispusimos de orientaciones precisas para ellos. A nadie debe escapar la complejidad de la responsabilidad asumida y debemos recordar la preocupación del General Seregni, en tanto Presidente del FA, en la formación de quienes deberían encarar tales tareas. Poco se pudo hacer, por diversas razones, en tal sentido. De manera que llegamos al gobierno nacional con una pobre preparación pero con muchas ganas de cambiar lo que antes criticamos.

EL ANALISIS DE LO REALIZADO

El Programa de Gobierno aprobado por el Congreso del FA atiende a la importancia de gestionar los servicios públicos; por ejemplo, señala la necesidad de disponer de ”indicadores de desempeño y compromisos de gestión como herramientas fundamentales para lograr los objetivos deseados en materia de calidad y cantidad de servicios brindados a la población”. Y también “La evaluación de los resultados de los programas constituirá un instrumento fundamental para la toma de decisiones respecto a la asignación de nuevos recursos públicos. Para ello, es necesario contar con un sistema de control de gestión, capaz de generar los incentivos adecuados y servir de mecanismo de rendición de cuentas de los organismos públicos” (GRANDES LINEAMIENTOS PROGRAMATICOS PARA EL GOBIERNO 2010 – 2014, pág 11)
La Plataforma Electoral (PE) que estamos construyendo debe reconocer que ahora conocemos las dificultades para llevar adelante los propósitos del FA en cada ámbito, en cada situación, en cada oficina. Nuestro primer gobierno aumentó los sueldos y salarios de empleados públicos y aplicó más recursos económicos (pagados por el pueblo) para mejorar la gestión. Hemos probado diversos procedimientos para mejorar la gestión y hemos comprobado cuáles han dado resultado u cuáles no. Ahora se impone que la PE establezca compromisos para perfeccionar la gestión y mejorar en tiempo y calidad los servicios públicos, reduciendo su costo a los usuarios mediante la simplificación de trámites, la informática, etc. Sabemos que es uno de los reclamos más extendidos de la población a la cual le pediremos otra vez el voto.
Tales son las razones para encarar la mejora de la acción pública pues hacen a nuestra vocación política, expresada por Seregni al salir de una década de prisión: “Fuimos, somos y seremos una fuerza constructora. Obreros de la construcción del futuro Uruguay democrático” Pero además, por razones electorales no debemos dejar el tema fuera de nuestro compromiso; no debe ser monopolio de Lacalle un discurso electoral dirigido a la racionalización y abaratamiento de los servicios públicos. Debemos comprometernos a que no se repita a nivel nacional la penosa situación de los servicios de la Intendencia de Montevideo, arrastrada por el FA durante tres lustros.
Desconocemos si existe un balance con evaluación de logros lugar por lugar, Ministerio por Ministerio, Ente por Ente, sección por sección, responsable por responsable. Naturalmente, cada uno de nosotros tiene percepciones puntuales, conocimientos a veces casuales de logros de nuestra gestión de gobierno. Por ejemplo, son notorios los cambios positivos en la emisora estatal de televisión. ¿No percibimos acaso los avances en el Correo?, ¿se puede ignorar lo realizado por el MIDES? Debe haber muchos otros casos estimulantes pero todo indica que carecemos de un mapa completo de la situación. Y no se trata de disponer un balance complaciente que solamente anote los avances para hacer propaganda electoral. Es eso pero también es más que eso pues estamos cumpliendo la gran meta a la cual apuntamos desde el nacimiento del FA: ser gobierno; no la podemos cerrar sin realizar un balance. Bien vale en ésta oportunidad recordar las recomendaciones de Seregni: “analizar los hechos, realizar una autocrítica serena, madura, realista… debe ser previa a cualquier consideración de actuación futura” (mensaje desde la cárcel, 10 de diciembre de 1982). Necesitamos un informe objetivo que señale en cada lugar de la administración pública los rezagos y sus causas; y que sea la base para avanzar en cada situación de servicios públicos que queremos volver a gestionar. Hay que identificar las trabas y comprometernos a superarlas.
Para encarar una nueva gestión del gobierno nacional el FA requiere tal insumo. Pero no es imprescindible para confeccionar la PE pues basta que lo dicho en los Grandes Lineamientos Programáticos lo expresemos como el compromiso de mejorar y abaratar la gestión del estado, y en particular los servicios públicos. El compromiso implica poner en primer lugar el interés nacional y de los usuarios, y por encima de corporativismos. Sin ceder a presiones y exigiendo como corresponde a los responsables que un nuevo gobierno del FA colocará en cada lugar. La PE debe decirlo de manera breve, clara y comprometida.

PROPUESTA
El segundo gobierno del Frente Amplio realizará un gran esfuerzo para mejorar la calidad, continuidad y confiabilidad de los servicios públicos, tomando medidas para que estén al alcance de todos los uruguayos. Igual preocupación se aplicará para mejorar el funcionamiento de los Entes del Estado que producen bienes para la sociedad.